El crimen de los adolescentes en Bosques genera más interrogantes que certezas. Aún no está clara la hipótesis de la investigación y las familias sostienen distintas posibilidades.
El juez de Garantías Nº 8 de Quilmes, Adrián Villagra, resolvió aceptar el pedido que había hecho el fiscal Hernán Bustos Rivas (Foto de Tapa), titular de la UFI N°5 de Florencio Varela, de apartarse de la causa que investiga el doble crimen de los adolescentes Paloma Gallardo (16) y Josué Salvatierra (14) tras un entredicho con el abogado de los padres de una de las víctimas.

Busto Rivas justificó su decisión de dejar el caso por presuntas amenazas de Carlos Diéguez, representante de la familia del adolescente. El abogado habría presionado al fiscal para que investigara una hipótesis alternativa al robo seguido de homicidio.
En tanto, la Fiscalía General de Florencio Varela debe resolver quién lo va a reemplazar al frente del expediente que investiga Homicidios de la Policía Federal Argentina (PFA).
Diéguez cuestionó puntualmente la idea de que los dos menores hayan sido asesinados en el lugar que fueron encontrados los cuerpos. Esa hipótesis se basaría en algunos indicios de la investigación y en la declaración de Alberto Salvatierra, padre de Josué.

Salvatierra dijo que sabía que su hijo solía encontrarse en el descampado con Paloma, pero creía en una zona “de pasto corto”, no tan adentro del predio, donde la vegetación es más densa.

Por su parte, Aníbal Osorio, el abogado de la familia de Paloma, aseguró que el padre de la joven, Omar Gallardo, que dio varias notas al Canal Crónica “no miente” al señalar que hubo un ataque sexual. “El padre de Paloma no habla sin fundamentos”, expresó Osorio en una entrevista reciente. La familia de la adolescente pediría, en esa línea, que se le realice una nueva autopsia al cuerpo.
Lo cierto es que a más de diez días del asesinato de los adolescentes, todavía no hay sospechosos identificados y el doble crimen ha generado más interrogantes que posibles certezas.

Los cuerpitos de Paloma y Josué fueron hallados el sábado 1º de febrero en un descampado, que La Colmena (ver nota y video) recorrió el domingo 2 de febrero, ubicado al lado de las vías, aproximadamente situado a 50 metros, debajo del puente en la localidad de Bosques, en cercanías de la fábrica de baterías Champion. A 100 metros de la ruta 36, en dirección a CABA, de Sur a Norte. Y a 8 cuadras de la comisaría 4ta. Tras permanecer desaparecidos desde el jueves 30 de enero.
La autopsia determinó que ambos fueron asesinados con repetidos golpes en la cabeza hechos con una piedra, no fueron atados y a Paloma no la agredieron sexualmente. (DIB) ACR