El mandatario comunal, Andrés Watson junto a funcionarios a nivel federal y provincial, acompañó a familiares de Andrea Viera en el descubrimiento de un cartel a 21 años de su homicidio a manos de efectivos policiales esta tarde frente a la Comisaría Primera -Av. San Martín Nº2576.

El Alcalde remarcó la lucha de su hermana -Eugenia Vázquez- “quien jamás claudicó en su búsqueda de memoria, verdad y justicia”. “En todo este tiempo, con diferentes obstáculos que podían presentarse, nunca bajaste los brazos. Por el contrario, esas dificultades te hicieron más fuerte, robustecieron tu causa”, expresó a la mujer.
Por otra parte, el titular en el Ejecutivo local subrayó la relevancia en la “presencia del Estado en sus tres estamentos para reafirmar ´Nunca Más´”. Consideró “fundamental visibilizar a través de las políticas públicas el total repudio hacia hechos como estos».

En tanto, el director federal de Políticas contra la Violencia Institucional -Mariano Przybylski- recordó la “decisión política de Néstor Kirchner, apenas asumió en la Presidencia, de crear el Programa Nacional de Lucha Contra la Impunidad (PRONALCI)”, propuesta donde por primera vez “le abrió la puerta a las familias de las víctimas”.
El subsecretario de Derechos Humanos bonaerense -Matías Moreno- definió al reconocimiento de los graves sucesos mencionados como “una deuda de la democracia”. Asimismo, destacó la puesta en marcha de iniciativas gubernamentales «en total diálogo y articulación» con el entorno de las personas damnificadas.

Por último, Eugenia Vázquez valoró la compañía de las autoridades y señaló a Andrés Watson como “el primer Intendente que en 21 años estuvo junto a nosotros en un acto de aniversario”. Con su mano en alto, indicó el rostro de Viera en el letrero donde “quedó inmortalizada para siempre”.
La señalización fue motorizada a través de un proyecto de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación con el artículo 3º de la Ley Nº26811 como contexto.
También estuvieron presentes autoridades de las fuerzas de seguridad, funcionarios municipales, miembros de organizaciones sociales y vecinos.

El caso
El 10 de mayo de 2002, Andrea Viera -de 25 años- junto a su pareja -Gustavo Cardozo- salieron de su hogar en Ingeniero Allan para visitar a un familiar. Ella estaba embarazada. En el trayecto del colectivo, decidieron bajarse por sentirse descompuesta. Justo en ese momento y lugar, policías actuaban ante un robo que había sucedido en la zona. Al verlos a Andrea y Gustavo sentados, los inculparon de ser autores del delito.

Tras ser aprehendidos y trasladados a la Seccional Primera, ambos sufrieron torturas de todo tipo. A la madrugada, una ambulancia sacó a la joven ya inconsciente de la dependencia rumbo al Hospital “Mi Pueblo”, donde falleció 12 días más tarde.