Una vecina envió a La Colmena varias imágenes en fotos y videos donde se observa a animales como ponis y una viejita llama con su hocico atado con una cinta que son utilizados en la Plaza Calegari, a metros de la estación de trenes en Florencio Varela, para sacar fotos a los pibes que concurren a los juegos infantiles bajo el calor sofocante del verano, aunque los vecinos no tienen la intención de dañarlos al contrario la mayoría se detiene para que sus hijos puedan darles amor .
La fotos con la llama seniors que está expuesta al sol del mediodía y durante largas horas al día, van desde 300, 600 hasta 1200 pesos depende el tamaño de la imagen e incluye “una vueltita por la plaza” . El mamífero domestico se lo ve muy cansado y descuidado, pero con agua para tomar.
Cabe agregar que se ven apostados a un hombre y un joven en la plaza varelense para que los chicos se saqueen fotos con la llama y los ponis, algunos son de verdad y otros son replica de pony a tamaño real que al parecer son de peluche, fibra o de resina.

La lectora termina preguntándose ¿sí los responsables de estos animales explotados se enmarcan en la “Infracción a la Ley N°14.346 de la Ley Nacional de Protección Animal”?. “Los animales no humanos están protegidos por leyes penales en Argentina.
Ley 14.346, sancionada en 1954, pena los malos tratos y actos de crueldad hacia los animales: Art.1) Será reprimido con prisión de 15 días a un año, el que infligiere malos tratos o hiciere víctima de actos de crueldad los animales. Art.2) Serán considerados actos de maltrato: 1. No alimentar en cantidad y calidad suficiente a los animales domésticos o cautivos; 2. Azuzarlos para el trabajo mediante instrumentos que no siendo de simple estímulo les provoquen innecesarios castigos o sensaciones dolorosas; 3. Hacerlos trabajar en jornadas excesivas sin proporcionarles descanso adecuado, según las estaciones climáticas; 4. Emplearlos en el trabajo cuando no se hallen en estado físico adecuado; 5. Estimularlos con drogas sin perseguir fines terapéuticos; 6. Emplear animales en el tiro de vehículos que excedan notoriamente sus fuerzas.