En el corazón palpitante de la mítica avenida Corrientes, cada sábado por la noche, una vieja superstición vuelve a cobrar vida. En la sala John Lennon del Paseo La Plaza, “Jettatore” —esa joya del teatro criollo escrita por Gregorio de Laferrère en 1904— resucita entre carcajadas, equívocos y una reflexión tan vigente como el primer día: cómo los prejuicios pueden torcer la mirada de toda una sociedad.
Con una trayectoria que respira pasión y disciplina. Hermes Molaro no aterrizó en la avenida Corrientes por azar: llegó caminando, función tras función, escenario tras escenario. Nacido artísticamente en Florencio Varela, moldeó su oficio lejos de los reflectores. No tuvo un salto, tuvo una escalera. Pasó por los teatros más exigentes del país —desde salas independientes hasta templos del circuito oficial y comercial— y en cada uno dejó una marca: constancia. Hoy pisa la avenida Corrientes con la misma calma con la que empezó, sin impostar épica, pero con la certeza de quien entiende que actuar no es llegar, es seguir estando.
Bajo la dirección sensible y precisa de Virginia Landi y el elenco de la productora Actuarte Studio vuelve a escena con una versión renovada, fresca y moderna de este clásico de la comedia de costumbres. Con ritmo dinámico y guiños actuales, Landi logra mantener la esencia del texto original y, al mismo tiempo, acercarlo a una generación que tal vez nunca haya oído hablar de un “jettatore”.
Entre un elenco coral que brilla por su compromiso escénico, Hermes Molaro encarna con elegancia y carácter al enigmático Don Ruffo. Molaro, construye un personaje de mirada penetrante y gesto medido, que aporta hondura a una trama donde la superstición y el humor se entrelazan con la precisión de un reloj de época. “Jettatore no es solo una obra, es un espejo de nuestras propias creencias —reflexiona Molaro—. Todos alguna vez señalamos a alguien como ‘yeta’, sin darnos cuenta de que ese miedo nos hace más vulnerables que la mala suerte misma”.
“Jettatore” funciona como una fiesta teatral: el elenco —que integran Hermes Molaro, Iago Di Fazio, Rodrigo Caminos, Joaquín Bodoira, Camilia Virgilio, Hernán Piccinelli, Natalia Iuliano, Virginia Landi, Mayra Calvo, Oscar Glass y Denise Geno— despliega una energía contagiosa que convierte cada función en un ritual de risas y pensamiento.
Pero más allá de las ovaciones, hay un mensaje que late: el teatro sigue siendo un acto de resistencia emocional y social. En tiempos donde las pantallas dominan los vínculos y la inmediatez reemplaza la pausa, sentarse en una butaca a mirar actores de carne y hueso es casi un gesto revolucionario. “Actuar es recordar que seguimos vivos —dice Molaro—. Que necesitamos mirarnos a los ojos para sentir algo real. Y eso, en estos tiempos, vale más que cualquier streaming”.
“Jettatore” no sólo revive una pieza esencial del repertorio argentino; también reafirma el valor del teatro como espacio de encuentro y espejo de nuestras costumbres. Una cita imperdible para quienes buscan reír, pensar y, sobre todo, recordar que la mala suerte no existe… pero el buen teatro sí.
Por Javier Galante – Buenos Aires, octubre 2025
JETTATORE
Todos los sábados de Octubre y Noviembre – 21hs
Sala John Lennon – Paseo La Plaza
Av. Corrientes 1660, CABA
Entradas disponibles en boletería y https://www.actuartestudio.com/event/24679