El jefe comunal Andrés Watson, otorgó hoy por la mañana anteojos a 43 alumnos oriundos del distrito tanto en la Primaria Nº41 como en la Nº27 mediante el programa provincial “Ver para Aprender”.
El Intendente consideró “clave a una iniciativa implementada de manera colaborativa entre el gobierno bonaerense, a cargo de Axel Kicillof, y el Municipio con un propósito: acompañar a las infancias en su crecimiento con una mejor calidad de vida”.
“Ejecutamos políticas públicas con la convicción de igualar oportunidades. En este caso, brindar a las chicas y los chicos la posibilidad de sumar conocimientos sin dificultades relacionadas a una patología visual que fue detectada e incluso corregida a tiempo”, afirmó el mandatario.
Los exámenes oftalmológicos realizados en ambas instituciones pedagógicas abarcaron a doscientos estudiantes. Los controles consistieron en diversos testeos exhaustivos de agudeza para un diagnóstico preciso sobre la prescripción o no de gafas.
La gerenta general de la Fundación Banco Provincia -Fabiana Rubinstein- colocó como misión principal “garantizar la salud ocular a las pequeñas y los pequeños que necesitaban ayuda en el cuidado de su vista”.
Nelson acompañó a su hijo Manuel a la escuela ubicada en la calle Sicilia. Provenientes de Santa Rosa, caminaron pocas cuadras hacia el lugar. “La atención fue espectacular. Me sorprendió porque desconocía que él tenía un inconveniente en la visión. Obtuvimos el resultado adecuado y comenzó el tratamiento”, describió.
Ariel -frentista de la zona- resaltó “el apoyo en el aspecto económico a la familia”. “Mi nene y mi nena usaban lentes, pero había que actualizarlos. Averigüé de forma particular. Costaban 250 mil pesos. Era demasiado caro. No podía pagarlo. Por suerte, esta propuesta solucionó ese problema”, reveló.
Al establecimiento ubicado en San Jorge, concurrió Mónica junto a Mateo. “En la revisión, la doctora le encontró una cicatriz en el ojo izquierdo provocada por una enfermedad. Estaba al límite de su capacidad. Fue una facilidad: sin obra social, era complejo hasta conseguir un turno médico”, especificó.
Silvia, vecina de la región y mamá de Luana, narró que su hija “arrancó con complicaciones al copiar del pizarrón; luego, para leer o escribir”. “Actuaron rápido. En menos de un mes, resolvieron una preocupación importante, ardua de afrontar”, aseveró.
Estuvieron la secretaria de Educación Andrea Digiobani, la responsable de la cartera sanitaria Adriana Alonso, directivos de las entidades anfitrionas más autoridades de la esfera educativa a nivel local, distrital y provincial.