“Un 26 de julio de 1952, pasó a la inmortalidad la abanderada de los humildes, nuestra querida y amada Evita. Recordarla es un sentimiento, pero honrarla es llevar a fuego el Peronismo a todos los rincones de nuestra Patria.
Hoy en esta inmadura Democracia, la cual demostró ser estática y no participativa, vemos cómo los principios rectores junto con los valores del Movimiento quedaron al margen, dando lugar a la especulación y al aprovechamiento de una pseudo dirigencia en sacar rédito personal usando al Partido y al Movimiento en beneficio propio o de una secta o círculo político privilegiado.
Hoy le faltan el respeto a Perón y a Evita y a todos los compañeros/as caídos en pos de una Patria Justa, Libre y Soberana.
El Peronista que saca provecho de su cargo o función no merece llamarse Peronista, es un infiltrado que los hay y muchos, dando muestra que lo que dijo en un momento el pirata inglés Wiston Churchill,conservador e ídolo de este presidente que hoy tenemos que a decir verdad lo está en casa Rosada por obra de esa Dirigencia que hizo tan mal las cosas o las hizo bien para ellos solamente. Retomando lo de Churchill, este nefasto personaje ya decía, » no dejen que Argentina tenga poder» y así mismo comentaba que se iba hacer todo lo posible para que no se llegue a eso, hasta incluso infiltrar el sector político para destruirlo desde adentro, cosa que se ve le resultó ya que para muestra sobra un botón y la realidad del pejotismo lo demuestra.
Ahora se ve a un nuevo Braden en escena, el nuevo embajador de yanquilandia queriendo poner orden a nuestra Argentina y seguir teniéndola de rodillas ante una Dirigencia ,en su gran mayoría, cipaya y entreguistas.
Evita, hoy diría » con los Dirigentes a la cabeza o la cabeza de los Dirigentes», por Dios hoy tendríamos muchos eunucos cerebrales
Evita y Perón, HLVS”

ADRIÁN CAPURRO