La intervención de la Comuna posibilitó que un hombre de 68 años en situación de calle hacía un mes, debido a dificultades para pagar el alquiler, volviera a comunicarse con su familia tras más de dos décadas.
Raúl Moyano acudió a la Secretaría de Desarrollo Social en búsqueda de ayuda. No imaginó que esa decisión cambiaría el rumbo de su vida. “Conversé con el personal que me atendió. Conté lo que me pasó. Ellos contactaron a mis parientes en Mendoza”, repasó. Cuando habló por videollamada con sus seres queridos la emoción fue inevitable. “Nunca los olvidé, siempre estuvieron presentes”, evocó.
Desde el Municipio, en articulación con el Hogar «Jorge Novak», ofrecieron un espacio de abrigo, brindaron asistencia alimentaria y organizaron su viaje a la provincia para el gran reencuentro. En ese contexto, Raúl anheló “disfrutar el tiempo con mis sobrinos en la casa de mi hermana”.
Renzo, uno de los operadores del refugio a cargo del Obispado de Quilmes, acompañó a numerosas personas en condiciones de extrema vulnerabilidad. “Acá tuvo un lugar donde descansar, cuidar su higiene y realizar actividades”, detalló.
Asimismo, el integrante del establecimiento comunitario subrayó el respaldo del Ejecutivo local “no solo en lo material sino al acercar a este sitio a gente con necesidades de las distintas zonas del distrito”.