La hallaron carbonizada en la cama y la autopsia determinó que la mataron a puñaladas.
Un joven fue detenido como acusado de asesinar a puñaladas a su novia y luego incendiar su cuerpo para intentar cubrir el crimen que fue perpetrado en una vivienda de Florencio Varela.
El cuerpo de Nara Ludmila Flores, de 19 años, fue encontrado el jueves pasado carbonizado en una casa, situada en el cruce de 1135 y 1152, de la localidad de Ingeniero Allan.
Al principio, cuando los vecinos se enteraron de que Nara Ludmila Flores, de solo 19 años, había muerto en un incendio , todo fue tristeza, una tragedia. Luego, esas sensaciones se transformaron en bronca. Es que el fallecimiento de la joven no había ocurrido como se creía. Nada era lo que parecía en esa escena del crimen reducida a cenizas en la que los investigadores comenzaron a dudar enseguida. Los forenses les darían la razón: había sido asesinada y no por el fuego.
El cadáver se encontraba en la cama y cuando fue sometido a una autopsia, se concluyó que la joven había sido apuñalada en al menos siete oportunidades, para luego ser prendida fuego.
La necropsia concluyó que la chica ya había fallecido en el momento en el que comenzó el fuego.
La autopsia al cuerpo de Nara, pedida por la fiscal a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N° 2 de Florencio Varela, Mariana Dongiovanni, fue la clave del caso y convalidó las sospechas de los investigadores. Los forenses concluyeron que el femicida primero apuñaló a la chica y después la prendió fuego. Ante esto, fue detenido la pareja de la víctima, de 21 años, en inmediaciones de la casa en la que se produjo el crimen.
El detenido fue llevado a la comisaría sexta de Florencio Varela, donde quedó alojado como imputado de homicidio triplemente agravado por mantener relación de pareja, por violencia de género y por procurar su impunidad.
Según indicaron voceros policiales citados por el portal Infobae, testimonios de vecinos y allegados a la pareja describieron al detenido como «posesivo y tóxico».(NA)