Los radicales bonaerenses fueron a las urnas ayer donde el intendente Miguel Fernández se impuso con el 52% de los votos a Pablo Domenichini.
En las elecciones internas del radicalismo en la provincia de Buenos Aires celebradas ayer, la lista oficialista «Unidad Radical,» encabezada por Miguel Fernández como candidato principal, se alzó con la victoria obteniendo el 52% de los votos, lo que equivale a 39,119 sufragios.
Fernández contó con el apoyo del senador Maximiliano Abad y Gustavo Posse y enfrentó a la lista opositora «Futuro Radical,» liderada por Pablo Domenichini. Con los resultados, las figuras de Martín Lousteau, Facundo Manes y Emiliano Yacobitti aparecen como los perdedores de la interna.
La participación en estas elecciones fue de 75,797 votantes, una cifra significativa considerando que el padrón total de afiliados registrados es de aproximadamente 600,000 personas. A pesar de esto, la movilización fue menor a la esperada, así como con la falta de competencia en varios distritos, ya que en 102 de las jurisdicciones provinciales se acordaron listas únicas, reduciendo la necesidad de movilización de los votantes.
El triunfo de «Unidad Radical» en esta interna representa un respaldo importante para Maximiliano Abad y su estrategia de mantener el control del radicalismo bonaerense y alejarlo de las influencias de los dirigentes porteños, como Martín Lousteau. En sus declaraciones, Fernández enfatizó la necesidad de que el radicalismo provincial conserve su autonomía y no se convierta en una «dependencia manejada a control remoto desde Buenos Aires».
Durante la campaña, las tensiones aumentaron cuando los intentos de formar una lista de unidad fracasaron. El sector de «Unidad Radical» acusó a sus oponentes de actuar de forma intransigente y de crear una disputa innecesaria en un momento delicado para el país. En cambio, el sector de «Futuro Radical» buscaba un cambio de liderazgo y la construcción de una nueva dirección para el partido, con la vista puesta en las elecciones generales de 2025.
Sin embargo, la fuerza del oficialismo y su consolidación en el interior de la provincia, junto con el apoyo de líderes locales como Gustavo Posse, le dieron a «Unidad Radical» una ventaja decisiva en las secciones electorales clave.
Los resultados oficiales aún deben ser confirmados por la Junta del partido, pero la diferencia obtenida por la lista «Unidad Radical» parece sólida y difícil de revertir. Este resultado no solo influirá en el manejo del Comité de la UCR de la provincia de Buenos Aires, sino que también tendrá un impacto significativo en la estrategia electoral del radicalismo a nivel nacional, de cara a las próximas elecciones presidenciales en 2025.(NA)