A dos meses del crimen de Lautaro Morello y la desaparición de su amigo Lucas Escalante en el partido bonaerense de Florencio Varela, la causa no tiene fiscal y la familia del joven que aún no fue hallado aseguró que se trata de un homicidio y una desaparición cometidos por «una familia de policías en democracia» y le reclamó a la Justicia algún avance en la investigación.
Familiares, amigos y vecinos de Escalante, el joven de 26 años aún continúa desaparecido reclamaron la «aparición con vida» mientras aguardan que sea sorteado un nuevo fiscal que se haga cargo de la causa.
Es que el expediente ya pasó por las manos de cuatro fiscales de ese departamento judicial que, por haberse excusado o porque solo estuvieron subrogando las fiscalías por las licencias de sus colegas, ya se apartaron de la investigación
«Vamos a marchar a tribunales porque es donde se pone una fecha para el día del sorteo del nuevo fiscal», expresó a Télam la hermana de Lucas, Romina Escalante, en referencia a una manifestación prevista para esta tarde a las 19 frente a los Tribunales de Quilmes, sobre la avenida Hipólito Yrigoyen 475.
«Hoy nuevamente estamos sin fiscal, nosotros queremos que haya fiscal ya y el sorteo tiene que ser urgente», dijo la mujer, quien agregó: «Queremos tener un fiscal como corresponde y que haga las cosas bien. Acá hay un pibe asesinado y un pibe desaparecido por una familia de policías en democracia y la causa no avanza mucho más por la lentitud de la Justicia».
Según voceros judiciales, la investigación de la muerte de Morello y la desaparición de Escalante no tiene aún un fiscal designado luego de que el juez de Garantías de Florencio Varela, Julián Busteros, dictó la prisión preventiva el pasado 19 de enero para los detenidos Cristian y Maximiliano Centurión, sobrino e hijo respectivamente de un comisario mayor de la policía bonaerense, quienes están procesados como «coautores» del delito de «homicidio calificado por ensañamiento y alevosía».
Dicha prisión preventiva había sido solicitada previamente por la fiscal Mariana Dongiovanni, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 descentralizada de Florencio Varela, quien luego pidió ser excusada de la causa por considerar que recibió «constantes descalificaciones» por parte de familiares de las víctimas.
Tras eso, su lugar fue reemplazado por la fiscal de feria Bárbara Velasco, quien también se excusó de la causa ya que manifestó haber colaborado con el comisario antes mencionado en causas pasadas, por lo que la investigación pasó a manos del fiscal Daniel Ichazo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 descentralizada de Berazategui.
Este último estuvo a cargo del expediente hasta que, quien había salido sorteado para reemplazar a Dongiovanni, el fiscal Martín Conde, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 de Quilmes, retomó de una licencia el pasado 1 de febrero.
Fuentes judiciales confirmaron hoy a Télam que, finalmente, Conde también solicitó ser excusado del caso el lunes pasado a través de un escrito por no poder ser objetivo tras haber recibido comentarios «calumniosos y agraviantes» por parte del abogado de la familia Morello, Carlos Diéguez, y este pedido fue aceptado por el juez Busteros.
Además, a pedido de la Procuración General de la provincia de Buenos Aires, la policía bonaerense fue apartada de la investigación y en su lugar está actuando la la División Homicidios de la Policía Federal Argentina (PFA).
El lunes pasado, esos detectives y bomberos y la División Canes de la fuerza federal realizaron nuevos rastrillajes en las zonas de interés para la causa, pero fuentes de la investigación revelaron que todos fueron con resultado negativo.
Escalante (26) fue visto por última vez el viernes 9 de diciembre en la localidad de Bosques, partido de Florencio Varela, cuando pasó a buscar a Morello (18) para salir a festejar el triunfo de la Selección Argentina ante Países Bajos por las semifinales del Mundial de Qatar a en bordo de un auto BMW que al día siguiente apareció incendiado.
El cuerpo semicalcinado de Morello fue hallado cerca de las 21.30 del pasado 15 de diciembre a la vera de la autopista en construcción Buen Ayre, en Guernica, partido de Presidente Perón, y nada se sabe aún de Escalante.
En tales circunstancias, fueron detenidos los Centurión, quienes quedaron vinculados al caso tras el análisis de cámaras de seguridad y de antenas de telefonía celular.
En una filmación de una cámara de una estación de servicio de Florencio Varela se ve a Cristian Centurión cerca de las 0.30 del 10 de diciembre cargando nafta en un bidón blanco que se sospecha pudo haber sido empleado para incinerar el auto de Lucas y el cadáver de Lautaro.
En este contexto, el Gobierno nacional ofrece 4.000.000 de pesos de recompensa para quienes aporten datos que permitan dar con el paradero de Lucas.