(18-2-22) Basura en todos los sectores y promesas varias de recuperar el predio, una plaza emblemática y muy cara a los sentimientos de los varelenses. Allí se guarda la memoria por las víctimas de la explosión del Rey de la Oferta, un polvorín oculto que dejó 5 víctimas fatales y 11 heridos en el año 2004.
Es zona olvidada para los servicios municipales. Por este motivo, fuimos hasta el lugar y bastó con dar una breve recorrida entre la popular barriada como para comprobar los dichos: basura por todos lados, olor y suciedad, según los vecinos de la zona, una situación que realmente se torna preocupante y sobre la cual hubo muchísimas promesas de solución de la ex Secretaria de Ambiente, ahora funcionaria nacional, Beatriz Domingorena. Pero no es solo ella, la principal responsable del estado actual de esta plaza. También es responsable, y por una cuestión de fondo, del Secretario de Obras y Servicios Públicos, quien nunca pudo ordenar esto por falta de ideas. Así de sencillo: Ideas.
La plaza une el centro comercial con la estación ferroviaria de Dante Ardigó. En el lugar funciona desde hace varios años una feria social sobre la cual las autoridades municipales parecen no tener responsabilidades como para hacerles cumplir con la limpieza. Promesas de ordenamiento, hubo muchas. Una de las últimas tiene casi 4 años. Por aquello días el municipio salió a poner la cara ante la publicación de otro medio gráfico local sobre el estado de la plaza.
AGOSTO DE 2018
El comunicado de prensa municipal prometía:
Por directiva del intendente Andrés Watson y en el marco del ordenamiento territorial del distrito y de mantención los espacios públicos limpios, comenzaron los operativos de limpieza y concientización ambiental en la zona de la Plaza del barrio Kilómetro 26,700, frente a la estación férrea Dante Ardigó, donde funciona una feria social los días jueves y domingos.
En este sentido, la Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Beatriz Domingorena, informó: «más allá de las acciones de control que correspondan en el marco de la normativa vigente, se está trabajando fuertemente para iniciar un proceso de ordenamiento y de limpieza para mantener este lugar limpio. En esto el área de Ambiente en conjunto con otras áreas que tienen poder de policía articularemos reglas de convivencia y realizaremos acciones conjuntas con la gente que desarrolla actividad en el lugar y también con los vecinos linderos para que colaboren en mantener ese espacio limpio y sostenerlo en el tiempo».
La funcionaria explicó que «se procederá a la limpieza del lugar durante las jornadas de hoy y mañana y durante la semana impulsaremos las jornadas conocidas como «Mi Barrio Limpio», articulando con la comunidad para que se sostenga luego de la limpieza con estrategias que permitan y faciliten el ordenamiento y la correcta gestión de los residuos que se están generando». Ver las fotos tomadas hace 48 horas que ilustran este informe.
EL MONUMENTO
Descuidado y sucio, así está el monumento en homenaje a las víctimas de la explosión en Kilómetro 26, ubicado en calle El Ombú al 600, en el corazón de la populosa barriada.
Llegar hasta el monumento es encontrarlo con los pastos crecidos, suciedad y con las rejas que lo circundan, oxidadas. El estado de las veredas, es deplorable. Mientras tanto otras plazas tienen mucha atención. Mientras tanto el concejal del barrio, Tony Suarez, no se da por enterado.
Cabe recordar que el 2 de enero 2004 en Florencio Varela, en el km 26 se produjo una trágica explosión que mató a 5 personas, al estallar un maxikiosco que ocultaba un depósito de pirotecnia clandestina, ubicado en frente de la Estación Dante Ardigó de la línea Roca, en las calles El Ombú y El Zonda .
Fue tremendo cuando aquella tarde del año 2004 voló todo por los aires y arrasó con media manzana. Dos grúas municipales y 19 dotaciones de bomberos trabajaron para despejar los escombros.
Unos 200 policías, mezclados con empleados municipales y vecinos, se desesperaron por remover piedras y ladrillos, al tiempo que perros entrenados especialmente buscaron sobrevivientes entre los escombros.
Otros vecinos, en cambio, se olvidaron de la solidaridad y saquearon un local de venta de aberturas y una peluquería.
El dueño del comercio siniestrado fue Carlos Sotier, conocido como El Rey de la Oferta, quien fue condenado a 13 años de prisión por la Justicia Federal de La Plata, al ser considerado culpable de los delitos de «estrago doloso y tenencia de explosivos» y debió permanecer recluido durante ese período, al no poder acceder al beneficio de excarcelación, debido a una causa anterior por tenencia de arma de guerra, radicada en los Tribunales de Lomas de Zamora. Por este suceso también fueron investigados 15 inspectores municipales, quienes habrían autorizado el funcionamiento del local, aunque después fueron absueltos.
LOS MUERTOS
Uno de los muertos como consecuencia de la explosión fue un odontólogo identificado como Loyola Segundo García Vázquez, de 45 años, que atendía a unos 30 metros del autoservicio. El hombre murió aplastado cuando una de las paredes de su consultorio le cayó encima.
Los otros fallecidos fueron dos empleados del Maxikiosko, Jorge Benítez, de 18 años, y Luis Alberto Quintero, de 19. Ambos quedaron sepultados por toneladas de cemento y ladrillos. La cuarta víctima Noelia Morales de 25 años, embarazada de 7 meses; cuyo cadáver fue rescatado entre los escombros y Hugo Emanuel Luna, un adolescente de 17 años.