Las normas de ordenamiento vial están establecidas, pero los vivos de siempre las violan a toda hora. La ausencia de educación vial.

La Colmena pudo observar que muchos conductores se “estacionan mal por varios minutos” porque retiran cosas que compraron en los comercios del centro y no quieren caminar unos metros. La actitud de «vale todo» cuando circulan por las calles de Florencio Varela es producto en muchos casos por la pasividad de las autoridades municipales, responsables directos de lo que ocurre con el tránsito en nuestro distrito.
Cabe agregar que a pesar de la severidad de la guardia comunal, la aplicación de las multas y el funcionamiento de la grúa los automovilistas estacionan en doble fila, siendo esta la infracción más común en el centro varelense. «Ya vengo», dicen los conductores y cuando los agentes municipales se acercan para hacerles la boleta, sacan a relucir sus contactos… Mientras, las calles céntricas, tales como, Sallarés, Mitre y Presidente Perón se transforman en un embudo por los vehículos mal estacionados.
En la avenida Presidente Perón pasa un colectivo de la línea San Juan Bautista , y la mujer que lleva una bolsa con productos, habla a los gritos con el conductor de una camioneta gris Peugeot estacionada sobre franjas amarillas de la mano contraria: “Te pido por favor que te muevas de ahí, que esta la parada de colectivos le dijo la señora, pero el hombre miró para otro lado.
Una mujer que debe entrar su auto en el garaje del comité de la UCR, ubicado en España esquina Mitre tiene que esperar que aparezca el conductor de un gol que lo estacionó tapando el acceso al lugar, miró, estacionó y no le importó nada. Prevaleció el “yo estacionó donde quiero”.
Otros conductores estacionan su auto sobre las veredas de la transitada avenida San Martín.
A pesar que desde hace un tiempo la comuna decidió reforzar desde el los controles y las multas a vehículos mal estacionados, tras observar un aumento de infracciones a la hora de estacionar los automovilistas siguen haciendo lo que quieren.
La Colmena pudo observar también que muchas de estas infracciones tanto a las normas dispuestas en el marco de la emergencia sanitaria por coronavirus, como también en las reglas más básicas: autos estacionados en ochavas, que puede ocasionar accidentes al reducir el espacio de giro y la visibilidad, como por ejemplo ocurre en las colectoras y avenidas San Martín y Presidente Perón.
Es el caso de varios autos que estacionan los días de semana en horas del mediodía , frente a los bancos. “Siempre se estacionan así acá, sobre la línea amarilla, la gente sabe de la multa y las cámaras, pero por ahí “bajan un minuto” al cajero y como no se alejan mucho no se hacen problema”, comentó a La Colmena un kiosquero.
Mientras otro comerciante habla con la cronista de esta publicación un motociclista y luego un auto se estacionan debajo de un cartel que no deja lugar a dudas: “No estacionar, exclusivo carga y descarga las 24 horas”. Un tercer vehículo, una camioneta particular, para inmediatamente al lado, sobre las franjas amarillas pintadas en el piso sobre la avenida Presidente Perón.
Cabe destacar que el aumento del tránsito creció notablemente en los últimos meses, con más actividades habilitadas y mucha gente que tienen que moverse en auto por sus actividades, porque el transporte público sigue reservado a los rubros esenciales y es complicado.
También se ven vehículos parados en espacios de carga y descarga, tapando rampas para discapacitados o frente a paradas de colectivos y donde está prohibido estacionar, sobre las calles céntricas están llenas de autos estacionados.
Asimismo , a pesar de que Tránsito municipal reforzó los controles para disuadir a los automovilistas de no estacionar de forma indebida, muchos estacionan donde quieren. Donde siempre está prohibido estacionar, como en las rampas, las ochavas y los accesos a cocheras…