César Moreno, director del Hospital “Mi Pueblo» de Florencio Varela, contó la situación epidemiológica que atraviesan. El médico fue uno de los que advirtió, antes del DNU que restringió la circulación en AMBA, que si se incrementaban los casos «nada va a alcanzar».
Cerca de 140 directores de hospitales públicos bonaerenses llamaron «a la solidaridad y responsabilidad de la ciudadanía» para enfrentar esta segunda ola de la pandemia de Coronavirus, porque si bien se «triplicó» la cantidad de camas UTI, «si los casos siguen aumentando, nada va a alcanzar».
En dicha solicitada -que se publicó el domingo 12 de abril- 139 autoridades sanitarias de la provincia de Buenos Aires afirmaron que es «el peor momento de la pandemia» y que «la cantidad de casos que son récords todos los días demuestran esta situación».
Los directores hicieron «un llamado a la solidaridad y a la responsabilidad ciudadana para salvar miles de vidas».
César Moreno, director del Hospital “Mi Pueblo» de Florencio Varela, fue uno de los firmantes y habló sobre “la situación de los hospitales bonaerenses” con un diario de la Patagonia “Tiempo Sur”. Esta es la entrevista:
-TS: De más está decir que es complicada la situación en Buenos Aires, pero el riesgo es que esto está aumentando en todo el país.
César Moreno: Sí, es como decís, en todo el país, pero principalmente acá en Buenos Aires, lo que es el AMBA, el gran Buenos Aires, y lo que es el primer y segundo cordón donde estamos complicados. Hasta ahora nosotros podemos dar respuestas necesarias en los hospitales. Estamos estresados pero no estamos todavía colapsados. Por lo menos en nuestro distrito y vecinos, no todavía. Estamos es una red de derivaciones de pacientes y demás y justo a donde estoy en Florencio Varela, contamos con un hospital modular que se puso en funcionamiento nuevamente como el año pasado, y no, no estamos colapsados. Pero sí estamos con un alto índice ocupacional de camas.
-Muchos profesionales advierten algo diferente al 2020: muchos jóvenes internados.
Sí, eso pasa, se incrementó. Pensamos que puede ser atribuible a que se está aplicando la vacuna en población objetivo de mayores de 60 años. Por lo tanto, no tenemos tantos casos como el año pasado en ese grupo etario. Suponemos que debe ser por eso, y esta vez hay más circulación de gente en la calle -y por eso se tuvieron que tomar esas medidas- da para pensar que por ese motivo se incrementó la incidencia en el grupo etario más joven.

-Sin ser alarmista, el peor temor es que haya mayor circulación en las provincias de las nuevas variantes del COVID-19.
Justamente para evitar eso, la gran circulación de las nuevas cepas, es que hay que tomar las medidas que se han tomado. A disminuir la circulación de estas nuevas cepas.

-Sin incluir a las restricciones existe un incumplimiento de las medidas mínimas de prevención, en cuanto al distanciamiento social y uso de barbijo.
Si, justamente tengo familia en otras provincias y constantemente estamos hablando y eso es lo que apuntan. Es como que se relajó un poco de cumplir con la distancia social y uso de barbijo y mucha gente cree que porque se está vacunando, se terminó el problema. Por eso hay que seguir fuertemente con las campañas de promoción y que la gente tome conciencia que la vacuna no es la solución definitiva, por lo menos, hasta que no haya un gran porcentaje de la población vacunada. Más del 60 o 70% para tener la inmunidad de rebaño.

-Usted trabaja hace más de un año con una misma situación de pandemia ¿Qué fue lo que más le llamó la atención?
Lo que más impacta es cuando cursamos los periodos de los picos máximos de casos, ver tanta gente internada y ver que no la pasan bien y la familia que a su vez sufre el impacto que genera la pérdida de un familiar y más que nada en estas condiciones, donde prácticamente no hay mucho lugar para la despedida….el impacto psicológico que está teniendo sobre las personas y sobre las familias afectadas, es lo que genera un impacto diferente a otras situaciones.

-No están prohibidas las reuniones sociales en nuestra provincia y varios distritos, pero son el principal foco de contagio.
Sí, totalmente. Lo vemos incluso nosotros porque es lo que nos está pasando con el personal de salud. Están vacunados y demás y siguen con todos los métodos para cuidarse en el lugar de trabajo, sin embargo seguimos con incidencia elevada de personal de salud que es positivo, o que se debe aislar por considerarse contacto estrecho, pero fuera del hospital. En el lugar de trabajo es donde menos se están contagiando porque siguen los protocolos, y elementos de protección, pero fuera del lugar de trabajo es donde se descuidan y donde entran en contacto y terminan contagiados o por lo menos son considerados contacto estrecho por no cumplir con las normas. Si eso nos pasa a nosotros con personal de salud, con el que no lo es, es para pensar que es peor la situación.

-Nadie habla de volver a Fase 1 pero muchos infectólogos hablaban de cerrar 15 días incluso antes del 8 de abril. Pero si estas medidas actuales no alcanzan, podrían haber más restricciones.
Se verá según el impacto que tenga en la curva. Si la curva se estabiliza o ameseta, ojalá Dios disminuya y baje. Eso es lo que va a llevar a las autoridades a tomar las decisiones sanitarias que correspondan. Sabemos que influye todo, la cuestión sanitaria y económica. Lo que muchos hablan es tomar acciones sectorizadas, de acuerdo a la curva que haya en cada territorio. Me parece que eso sería muy acertado.