A 2 años de su muerte
Corina Cardozo, 34 años, una de las hijas del notable y querido doctor Oscar Cardozo, escribió una conmovedora carta al cumplirse 2 años de su fallecimiento. Corina cuenta como fue la historia del obstetra y ginecólogo varelense, la perdida y el impacto que significó en sus pacientes que atendió por más de dos generaciones. Cabe destacar que llamó la atención las innumerables mensajes de afecto que recibió el destacado profesional tras su fallecimiento en las redes sociales y que perdura en la actualidad la relación de adoración de las pacientes hacia el trabajo profesional del médico. También fue fundador del Centro Médico Monteagudo, donde hace semanas atrás se inauguró el consultorio 2 que lleva su nombre. Murió el 13 de noviembre de 2018 tras batallar contra una enfermedad terminal. Tenía 51 años.
Esta es la carta enviada a La Colmena:
“Puedo decir que mi padre fue una persona que siempre hizo lo que quiso y le gustaba hacer, nunca salió de ese camino, dueño de un carisma muy especial, lograba que las pacientes al verlo sintieran un bienestar y felicidad únicos.
Yo había nacido y él seguía estudiando, perfeccionándose de forma constante, su pasión eran los casos difíciles y complicados, le encantaba encontrar soluciones a problemas que otros médicos no lograban resolver.
Como nota de color en 1996 fue noticia ya que había traído el primer bebe del año nuevo, para describir su trabajo puedo decir que trabajo en varios hospitales y clínicas hasta que en el 2001 abrieron Consultorios Monteagudo donde trabajo hasta unos meses antes de internarse lugar emblemático donde sus pacientes que se quedaban hasta altas horas de la noche esperando para ser atendidas única y exclusivamente por él, Hoy el consultorio 2 de este Centro Médico lleva su nombre en honor a tantas satisfacciones recibidas y recuerdos inolvidables de su labor.
No tomaba vacaciones siempre estaba pendiente de sus pacientes, aunque dejara reemplazantes se preocupaba de darles el alta en persona y los días domingos hacia su recorrido como una rutina inamovible.
Volviendo al trabajo en el Centro Médico Monteagudo, atendió varios años y los últimos estuve personalmente acompañándolo, luego siguió mi hermana y ahí me di cuenta la importancia que tenían las pacientes para él, eran parte de su vida si tenía que usar su auto para llevar alguna mami que estaba con contracciones lo hacía, su prioridad en todo momento siempre fueron sus pacientes
El que ángel!!! Que junto a sus conocimientos trajeron un gran éxito a su carrera, había pacientes que venían a verlo de distintas localidades y hasta provincias
En un momento el atendía por orden de llegada y las chicas hacían fila desde las 6hs am, ver esto era algo increíble para todos!!! Un amor mutuo, el daba todo por ellas y sus pacientes lo daban todo por él sin importar la espera
Yo tuve la suerte de tenerlo como médico obstetra me acompañó en el embarazo de mi primer bebe y estuvo cada semana cuidándome con un ímpetu mayor al que yo misma podría tener, tuve la dicha que conozca a su primer nieto, traerlo al mundo para el fue muy especial convirtiéndose inmediatamente en su debilidad.
Tiempo después, tuvo que dejar de operar y esto le afecto mucho, no poder ejercer por completo su profesión
La enfermedad avanzo y cada vez se complicaba más al punto de tener que internarlo, una amiga de él, la Lic. Claudia Zarate creó un grupo de Facebook para que todas pudieran expresar su cariño y hacerle llegar sus muestras de amor, plegarias y oraciones a su favor.
Un día fueron a la clínica muchas de sus pacientes y el pudo ver que todo su esfuerzo y dedicación tenían su fruto, a pesar de no tener la lucidez habitual, pudo sentir lo importante que fue su trabajo para tantas chicas que lo amaban de forma incondicional.
Desde ese momento fueron contando historias y anécdotas en el grupo de facebook, fue un gesto muy lindo y agradecemos a cada una que tomo su tiempo para hacerlo, yo como hija me enorgullezco por todo lo que hizo mi padre en vida y hasta el día de hoy en el recuerdo más profundo de tantos corazones.
En 2019 recibimos un reconocimiento y mención especial por su labor, la entrega del premio coincidió con su cumpleaños fue muy emotivo, será recordado por siempre el DOCTOR que dio su vida por sus pacientes y profesión,
Para mi es una gran felicidad todo lo que hizo en vida y puedo decir que el verdaderamente tenía una misión en la tierra. Como persona le encantaba juntarse con amigos y pasarla bien, en sus últimos momentos comenzó a tomar conciencia que debía descansar mas, irse de viaje y vivir otras cosas fuera de su profesión
Fue muy difícil decirle adiós porque era una persona joven y alegre como pocos!!! más allá que estaba enfermo hacia un tiempo, no me imaginaba que llegara el final y lamentablemente en medio de su enfermedad, cayó en una depresión por varios temas personales, que creo fueron el detonante para que las cosas pasaran más rápido.
Me quedo con el mejor recuerdo, de mi padre su vocación y amor para ayudar a tantas personas que hoy lo tienen en su corazón marcado a fuego”.