El salón de la Asociación Japonesa se preparó y sanitizó con 20 camas
Los lugares de confinamiento fueron pensados para aquellos vecinos que por una cuestión clínica no están dentro de los criterios de internación, pero no tengan las condiciones para hacer el aislamiento en su domicilio, edilicias o habitacionales, por convivir con personas dentro de los grupos de riesgo.
Frente al avance de la pandemia se dispusieron en Florencio Varela 9 centros de aislamientos donde se distribuyeron las 452 camitas de pino, para las personas que hayan adquirido la enfermedad y se recuperen. Ya que los centros de aislamiento fueron pensados para aquellos vecinos que “por una cuestión clínica no están dentro de los criterios de internación, pero no tengan las condiciones para hacer el aislamiento en su domicilio, edilicias o habitacionales, por convivir con personas dentro de los grupos de riesgo.
Los vecinos contagiados optan por llevar su proceso de confinamiento en sus viviendas, pese a que están disponibles los lugares. Este grupo está conformado por personas entre 20 y 50 años económicamente activas. Fuentes confiables aseguraron a La Colmena que son monitoreados desde el municipio telefónicamente y que llevarían la enfermedad muy bien en sus casas.
Los lugares que fueron dispuestos para tal fin son sociedades de fomentos, clubes barriales y entidades municipales, como el Polideportivo La Patriada que es el lugar más grande y sus instalaciones tanto el Salón de Usos Múltiples y el gimnasio se han readaptado, y están calefaccionados. Setenta literas están situadas en el SUM y unas 150 en el gimnasio, para el aislamiento, junto a divisiones que resguarden la intimidad del paciente.
En Varela se adaptaron demasiados centros de cuarentena para acomodar a los pacientes que tienen síntomas leves o aún están en período de incubación. Hay instalaciones que estarían por “bajar las persianas ” por falta de pacientes y por el costo que ello genera, desde lo económico. Tal es el caso concreto de la Asociación Japonesa de Florencio Varela cuya sede había sido cedida al Municipio para que se disponga del lugar , en un gesto solidario de la institución para destacar, como un centro de aislamiento de emergencia para personas infectadas con el Covid-19 y, de esta manera, evitar su propagación. La sede, que contaba con todas las medidas de seguridad, además de aire acondicionado frío-calor, cocina y equipamiento de enfermería, para recibir hasta 20 pacientes. “No tiene sentido que siga en funcionamiento la institución si no hay gente”, es mucho el costo”, manifestó uno de los integrantes de la entidad varelense a La Colmena.