Hola mi nombre es Mirta Alicia Rios. Naci en Argentina en una hermosa cuidad en Florencio Varela, donde cursé mis estudios secundarios en la antigua escuela Nacional de Comercio Dr. Florencio Varela, Anexo Bachillerato, allí pase hermosos años e hice muy buenos amigos. Estudie en Buenos Aires en la A.O.A (Asociación Odontológica Argentina) y con esa preparación un día motivada por mi madre querida, inicié el camino a una nueva vida en la ciudad de Nueva York en los E.E.U.U. Fue en 1991, hace 29 años. Con expectativas, miedos, y sueños este gran país y su gente me ayudaron a que sean realidad. En la actualidad me desempeñó en NY como Notaria Pública e Inspectora Comercial. Hoy el 14 de abril del 2020 estoy aquí viviendo algo que no esperábamos ni nunca imaginábamos pasar: la pandemia. El confinamiento comenzó el 16 de marzo.
Déjenme decirles que amo mi barrio de Maspeth, Queens como a mi Florencio Varela. Es un barrio de casas bajas, no edificios y vecinos muy tranquilos que nos respetamos y cuidamos mutuamente. Eso permitió que aun no tengamos ningún infectado con el malamente famoso Coronavirus. Pero con dolor observamos que barrios vecinos como Manhattan, Brooklyn, Bronx, y otros barrios de Queens han sido grandemente afectados. Como ciudadana Americana, desde hace más de 20 años tengo todo el derecho a la protección económica que brinda este gobierno manejado por tres grandes hombres de la política como president Donald Trump, gobernador Cuomo, y nuestro alcalde Senor De Blasio, que a pesar de que tienen sus guerras políticas no nos desamparan a nosotros, el pueblo americano, en ningún momento. Cuando se desarrolló esta crisis de la enfermedad y el virus comenzó a lastimar a nuestra Sociedad, tuvo un efecto dómino. Se cerraron las escuelas, poco a poco también los negocios, y las grandes y pequeñas empresas. Así empezaron a mandar a todos sus empleados a su casa y a aplicar para un desempleo. En el cual pagan el 50% semanal de lo que uno gana en estado activo. También un apoyo adicional de Us$600.00 semanales para que estemos bien y no pasemos necesidades ya que poco a poco la cantidad de desempleados aumentó y ahora llegó a millones. Acá todo es electrónico si te dan un cheque le sacas una foto y lo depositas, no necesitas ir.
Hay cajeros automáticos por todos lados
Y a cualquier hora
Acá las autoridad gubernamental está formado por el gobierno federal, el presidente, y el estado de Nueva York. El gobierno federal también empezó a mandar us$1,200 adicionales de refuerzo por persona y us$500 por cada niño. Aún estamos esperando que esto pase y que descubran la vacuna que va a salvarnos. Somos un país muy grande y Nueva York tiene la mayor población y la visita de gente del mundo entero. Eso sumado a que no se cerraron las fronteras con rapidez, creo esta triste situación. La parte difícil de esta historia es que hay muchos hospitales, especialmente en las zonas pobres que no estaban bien preparados. Comenzó a morir mucha gente y los desbordaron hasta que llegaba la ayuda del gobierno se pasaron momentos muy tensos. Y tenemos un sector de la sociedad que es el más dañado, formado por inmigrantes que ingresaron al país, pero que nunca se legalizaron. Esto es decir que no tienen derecho a ayuda monetaria y salen a trabajar por su necesidad económica y eso facilito que el virus se propagara más fácilmente. Pero, la atención médica es gratuita para ciudadanos e inmigrantes amparando a todos sin discriminación. Y así estamos hoy, en cuarentena. Todo está absolutamente cerrado. Hay un grupo de negocios que se llaman “esenciales” que nos permite comprar comida y medicamentos. Para acceder a ellos hay que presentarse con mascaras y hacer filas guardando dos metros de distancia. Lo cual es terible salir a comprar esquivando a los otros.
Estamos en Nueva York, la cuidad que nunca duerme pero que hoy le toca descansar. Saludos desde Nueva York y que Dios bendiga el mundo entero.